Contrario a la creencia popular de que las baterías de auto fallan principalmente en invierno, con las temperaturas extremas que Chile enfrenta en diciembre y la proximidad de viajes largos de vacaciones, las baterías reducen su vida útil de 51 a 30 meses. Esto significa que el calor extremo puede acortar la vida de la batería en casi dos años comparado con climas templados.
Debido a este contexto es que diciembre puede ser un mes complejo para el buen funcionamiento de las baterías. Desde Autoplanet explican que el principal problema radica en la velocidad de corrosión interna de la batería, donde la batería de auto funciona mediante una reacción electroquímica dentro de un electrolito.
“El calor ambiental extremo, especialmente bajo el capó en verano, acelera esta reacción. Esta aceleración provoca que el agua dentro del electrolito se evapore más rápido y que las placas internas de plomo se sulfaten y corroan a una tasa mucho mayor”, dice Sebastián Cruzat, product manager de Autoplanet.
Agrega que en términos simples, “el calor la ‘cocina’ desde adentro, degradando su capacidad de retener y suministrar carga, y esto ocurre principalmente en diciembre, justo antes de los viajes largos”.
Respecto a una mantención efectiva de la batería, hay tres puntos clave a considerar, incluso para las baterías selladas. Uno de ellos es la limpieza de bornes (terminales), libres de corrosión blanca o azul (sulfato de plomo), lo cual asegura una conexión eléctrica eficiente. Estas se pueden limpiar con una solución de agua con bicarbonato de sodio.
Otro punto es el ajuste y fijación. Se debe asegurar que la batería esté bien sujeta a su base. La vibración excesiva durante el viaje por carreteras irregulares daña internamente las placas.
Por último, una buena mantención, dicen desde Autoplanet, implica verificar que el alternador del vehículo esté cargando la batería dentro del rango de voltaje adecuado (generalmente entre 13.8V y 14.5V). Una sobrecarga constante causada por un alternador defectuoso es tan destructiva como el calor.
Otro aspecto relevante es la frecuencia recomendada para cambiar la batería. Según Sebastián Cruzat, si bien su vida útil puede bajar a 2 años y medio producto del clima, “se recomienda una revisión exhaustiva del estado de la batería (capacidad de amperaje y voltaje) cada 12 meses después del segundo año de uso. Es mejor no esperar a que la batería falle por completo, ya que esto suele ocurrir en el momento menos oportuno”. Agrega que si la batería tiene más de 3 años y el vehículo tarda notablemente más en encender, se debe reemplazar.
A la hora de planificar un viaje como los que se darán este fin de año o para las vacaciones, es aconsejable tener un margen de al menos una semana de anticipación para revisar la batería. “Esto permite tiempo suficiente para diagnosticar cualquier problema y, si es necesario, reemplazar la batería. Revisarla el día antes del viaje puede resultar en tener que buscar un reemplazo de emergencia, lo cual siempre es más costoso y estresante”, recalca el product manager de Autoplanet.