La invitada de piedra. Carnívora, con tentáculos venenosos de hasta 50 metros de extensión y presente en prácticamente todas las aguas cálidas del mundo. Estas son algunas de las características de la physalia physalis, también conocida como fragata portuguesa.
Especie que a mediados de la semana pasada fue vista en la Región de Valparaíso, obligando a cerrar playas en Maitencillo además de Puchuncaví y que este domingo hizo su aparición en La Serena y Coquimbo, provocando que se prohibiera bañarse en sus costas. Específicamente entre El Faro y el sector de Peñuelas.
Cierre de playas que de acuerdo a la Seremi de Salud, se extenderá a lo menos, hasta la tarde de hoy martes, por cuanto se encontraron más de estos ejemplares.
“Lamentablemente apareció este hidrozoo, que en realidad es una colonia y tiene un veneno contenido en sus extremidades, lo que es bastante peligroso para la comunidad. Sobre todo, para los niños que son bastante curiosos (…) este animal se pega con sus tentáculos y tiene un resultado urticante, el que dependiendo de las características de la persona, puede ocasionar shock anafiláctico, dificultad respiratoria y hasta la muerte”, indicó el secretario regional ministerial, Alejandro García.
De hecho, reveló que un bañista fue picado en Tongoy y tras ser tratado en un CESFAM, resultó sin mayores complicaciones. No obstante, la autoridad descartó que se prohíba el baño en este balneario o en Guanaqueros, porque la frecuencia de los hallazgos de fragata portuguesa aún es mínima. “Hemos encontrado ejemplares, pero no es constante. El número ha sido bajo y la frecuencia de su aparición no ha sido importante, por lo tanto no hay riesgo. En el caso en que se reporte una mayor frecuencia, obviamente vamos a tener que tomar la medida de cierre de playas”, agregó.
Sanciones millonarias
Respecto de las multas a las que se arriesgan quienes sean sorprendidos bañándose, García aseguró estas van desde las 2 y hasta las 1.000 UTM. Si, más de 54 millones de pesos.
“(La sanción) depende de la gravedad. O sea, si entiende a la primera, no hay ningún problema y no se le hace un sumario… pero si no entiende o se pone un poco porfiado, está arriesgando su vida y la vida de los demás”, especificó.
Eso sí, el seremi subrayó que quienes practiquen deportes acuáticos con su traje de neopreno correspondiente, si podrían meterse al agua al tener un menor riesgo de contacto con el hidrozoo.
Dificultad para pronosticar su aparición
“Nunca se debe tomar a este animal a mano desnuda y menos con el pie u otra parte del cuerpo. Si se encuentra alguno, lo que debe hacer es avisar a los marinos que están recorriendo las playas o a los salvavidas. En el caso en que se pegue a alguna parte del cuerpo, nunca sacarlo con la mano sino colocarse una bolsa o la ropa. Además, la herida hay que lavarla con la misma agua de mar, no dulce y echar un poco de vinagre porque eso contrarresta el dolor y la toxina”, finalizó.
La aparición de la physalia physalis es variable en ocurrencia y número de ejemplares detectados, lo que estaría relacionado con la dirección y velocidad de los vientos, la temperatura superficial del mar y otros factores ambientales que dificultan el desarrollo de modelos predictivos para prever su presencia.
Evaluación constante
Quien también se refirió a esta situación, fue el delegado presidencial en la Región de Coquimbo, Ignacio Pinto, quien sostuvo que existen las posibilidades de que las personas puedan disfrutar del sol, del borde costero, “pero el baño específicamente provoca el riesgo de que la fragata portuguesa pueda acercarse y generar cualquier tipo de complicación sanitaria”.
De esta manera, recordó que “nuestra misión es resguardar la salud de quienes nos visitan y por eso hemos tomado esta determinación (prohibición de bañarse), la que está en permanente evaluación según la aparición que tenga”.
En esta línea, destacó que “se ha registrado una presencia importante de fragata portuguesa en Tongoy, Puerto Velero y otras playas de la región. Por lo tanto, el monitoreo es permanente”.
